“No hay mal que dure cien años ni cuerpo que los aguante”, pero, al paso del tiempo los mexicanos solo hemos podido constatar una cosa, los conflictos de interés son el apellido insustituible de todos los sexenios, sin importar partido político o sector en específico.
Le sucedió a Enrique Peña Nieto y su famosa #CasaBlanca de Grupo Higa, le ocurrió a Felipe Calderón con su entrada al consejo de administración de Avangrid (filial de Iberdrola) y por supuesto que también le paso a Vicente Fox con sus escándalos de financiamiento irregular.
Pues bien, en la 4T no quisieron quedar mal con dicha tradición y se pusieron al día con #LaCasaGris o #LaCasaDeHouston propiedad alquilada por Keith Schilling (EX alto directivo de la empresa contratista Backer Hugues, la cuál, presta servicios a PEMEX), al hijo mayor de AMLO, José Ramón López Beltrán, quien a bote pronto señaló que dicho contrato pertenecía a su esposa Carolyn Adams, quién se desempeñó como cabildera de Cava Energy, también proveedora de servicios para PEMEX.
Y en todo esto… ¿en dónde entra Grupo Vidanta?, bueno, pues todo comienza a mediados de 2018 cuando AMLO (aún en campaña), conoció a Daniel Chávez, dueño de Grupo Vidanta (conglomerado de hoteles, centros turísticos y desarrollador de bienes inmuebles de lujo), con el cual, hizo buenas relaciones para impulsar su proyecto insignia: “El Tren Maya”.
Actualmente, Grupo Vidanta no solo está relacionado con el proyecto del Tren Maya (ya que, Daniel Chávez es “Supervisor honorario” de la obra), también son poseedores y operadores del aeropuerto internacional - Mar de Cortés, son dueños del desarrollo hotelero “Grand Luxxe” (el resort más lujoso de su tipo), ubicado en la Riviera Maya y para rematar, recientemente agregaron a los menús de los restaurantes en sus hoteles, bebidas preparadas y/o brandeadas con la marca de chocolate propiedad de los hijos de AMLO, el famoso “Chocolate Rocío”.
Pero, la cosa no acaba ahí, ya que, una vez destapado el escandalo de la casa en Houston, José Ramón López Beltrán fue cuestionado acerca de sus ingresos o a qué se dedicaba como para mantener ese tipo de lujos, a lo que el hijo mayor de AMLO, declaró que se desempeña como “asesor legal de desarrollo y construcción” en la empresa KEI Partners, la cual, es propiedad de Érika e Iván Chávez (hijos de Daniel Chávez, antes mencionado).
Las actividades de KEI Partners se desarrollan en el mismo sector que las de Grupo Vidanta, ya que, ofrecen servicios “enfocados a la hospitalidad, administración de restaurantes y diseño de interiores para crear y asesorar sobre algunos de los hoteles más importantes de Texas”, dicha empresa cuenta con un registro de fundación fechado en octubre de 2018, sin embargo, su página web fue recién creada el domingo 13 de febrero (de acuerdo con los algoritmos y metadatos), aunque KEI Partners ya sacó un comunicado en donde aseguran que José Ramón trabaja con ellos desde 2020 y que su sitio web está activo desde 2019.
Es cierto, Grupo Vidanta NO cuenta con contratos ni licitaciones por parte del gobierno federal, sin embargo, su actuación hasta el momento podría incurrir en un conflicto de interés mucho mayor del que parece.
