Este 20 de junio, en una emotiva ceremonia realizada en el Museo de la Ciudad de México, se presentó el nuevo himno oficial de la Ciudad de México. La obra, compuesta íntegramente por mujeres, marca un hito histórico al ser la primera vez que una capital en el mundo cuenta con un himno creado por este colectivo.
El Jefe de Gobierno de la CDMX, Martí Batres, presidió el evento acompañado por la Secretaria de Cultura, Claudia Curiel de Icaza; la Secretaria de las Mujeres, Ingrid Gómez Saracíbar; y la compositora del himno, Marcela Rodríguez, quien además dirige el Colectivo Ombligo de la Luna.
Un himno que refleja la esencia de la CDMX
La letra del himno, escrita con un lenguaje poético y alejado de temáticas bélicas, celebra la identidad y la diversidad de los pueblos originarios que habitan la ciudad. Además, incluye fragmentos en lengua náhuatl, un elemento que enriquece la composición y reafirma las raíces prehispánicas de la capital.
Un proceso creativo colectivo
La creación del himno fue el resultado de un amplio proceso de participación ciudadana, en el que se recopilaron propuestas y opiniones de diversos sectores de la población capitalina. La música, compuesta por Marcela Rodríguez, refleja la multiculturalidad y el dinamismo de la CDMX.
Las autoridades capitalinas destacaron la importancia de contar con un himno que represente a la ciudad y que sirva como símbolo de unidad e identidad para sus habitantes. Se espera que el nuevo himno se interprete en eventos oficiales y cívicos, y que se convierta en un referente cultural para las futuras generaciones.
La presentación del himno de la CDMX marca un hecho histórico, no solo por ser la primera vez que una capital cuenta con un himno compuesto por mujeres, sino también por la forma en que se creó, a través de un proceso participativo y con una letra que refleja la esencia multicultural y diversa de la ciudad. Sin duda, este nuevo himno se convertirá en un símbolo importante para la identidad capitalina.
La compositora Marcela Rodríguez explica que para integrarlo todo pidió ayuda de varios expertos y más compositores que formaron el colectivo Ombligo de la Luna. Por acá les dejamos la letra:
Ciudad de México, espejo mágico, llevas en tu nombre el ombligo de la luna.
Tus canales, de fuego, de aire, de asfalto.
Circulación sanguínea movimiento perpetuo.
Ciudad de México, cercado cósmico, guerrera mística, espejo lúcido, precipicio horizontal.
Turquesa, agua preciosa, tuna de piedra, nopal divino.
Nocturna, sueño latente, ciega vidente, ciudad milagro.
Grita, grita, águila erguida, agua quemada, guerra florida, vuela, vuela, sigue tus rumbos.
Cuatro caminos cruzan el centro, se tuerce, se encorva, buscando su armonía.
Ciudad de México, cercado cósmico, guerrera mística, espejo lúcido, precipicio horizontal.
Caos, caos, caos, caos, caos, caos, es tu armonía.
Orden, orden, orden, orden, orden, orden, desbordado.
Serpiente emplumada en el segundo piso duplicada.
Abarcas todos los colores del cosmos.
En tanto dure el mundo no acabarán la fama y la gloria de Meshico, Tenochtitlán.