• ¿Qué tan barato era lo caro?
En uno de mis tantos “breaks laborales” (procrastinación le llaman ahora), encontré un video muy peculiar en TikTok, el cual, me impresionó bastante, se trata de un anuncio publicitario de la empresa Mc Donald’s perteneciente a los inicios de los años 2000 y estoy seguro de que también te va a dejar impactado:
Si hacemos alegres cuentas, actualmente la hamburguesa con queso de Mc Donald’s se vende en $30 pesos, es decir, su precio aumentó un 272.73% y ojo, esto no es un reclamo en contra de la cadena de comida rápida, sino, un ejemplo de lo cara que se ha vuelto la vida.
Poniéndonos en situación, actualmente pagar $11 pesos por una hamburguesa sencilla es IMPOSIBLE, ya que, inclusive en el comercio informal (puestos de la calle), la hamburguesa sencilla ronda los $45 pesos y si queremos prepararlas en casa, entonces estamos hablando de un lujo, ya que, para preparar 8 hamburguesas (que es la cantidad de bollos que traen los empaques), el gasto se estima entre los $400 a 500 pesos.
• Influencer vs futbolista “termina mal”
La noche de este miércoles 13 de julio, los Pumas recibieron en Ciudad Universitaria al Celta de Vigo, equipo de la Liga Española, en lo que se denominó como un “amistoso internacional”, al ser parte de la agenda en la pretemporada del club europeo. A decir verdad, el club universitario demostró superioridad en la cancha, sin embargo, no pudo reflejarla en el marcador, ya que, el partido terminó 1 -1, pero…. Lo anterior dicho se vio opacado por lo que sucedió al finalizar el encuentro, ya que, un influencer “le ganó” una playera a un futbolista profesional.
El suceso tuvo como protagonistas a “Isra-No soy chema” (ex miembro del werevertumorro crew) y a José Navarro, canterano de los Pumas, quienes buscaban pedirle su playera a Lago Aspas, jugador del Celta de Vigo y de la selección española. En un vídeo publicado por el periodista Álvaro Cruz Santibáñez de TUDN, se observa el momento de la tragedia e incluso se escucha como el canterano de Pumas dice: “ya me ganaron wey”.
Con esto solo queda comprobada una cosa, “verbo mata carita, dinero mata verbo y… ser influencer lo mata todo.
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