En mi caso pasa lo mismo, su servibar ha perdido la cabeza –sic- en varias ocasiones debido a los favores de algunas damiselas y seguro a muchos de ustedes amigos heterosexuales también.
A principios de los ochenta, Steve Porcaro, tecladista de la banda Toto; justo en la grabación del cuarto álbum de la banda, tuvo a bien flirtear con Rosanna Arquette quien ya llevaba un divorcio a cuestas y se encontraba filmando The Executioner's Song con Tommy Lee Jones.
Fue tal el hechizo que esta chica puso en Steve, que éste, en compañía del letrista David Paich, le escribió uno de los cortes más famosos y mejor logrados de la banda: Rosanna, incluido en al álbum Toto IV.
A ella le gustaba quedarse por las noches a las sesiones de grabación de su canción mientras hidrataba al grupo con jugos y cervezas. Pese a este imperecedero regalo, el noviazgo no duró y Rosanna terminó casándose nuevamente, esta vez con el compositor James Newton Howard -tecladista de Elton John- Qué extraña preferencia la de esta mujer con los tecladistas. Relación que también terminó en divorcio.
En esa época, otro músico (que entre otras cosas también domina los teclados) llamado Peter Gabriel, acababa de despachar al resto de su banda –Genesis- y comenzaba a ser reconocido en solitario. A Peter también le cayó el hechizo de Rosanna y algunos dicen que en verdad lo tenía empiernado. Peter no dudo y convenció a Rosanna de irse a vivir juntos a su palacete en Surrey en el sureste Inglés. Era tal la magia que ejercía la mirada de esta chica sobre el talentoso maestro, que un buen día de 1985, Gabriel se levantó de la cama que compartía con Rosanna, y en medio de la noche se puso a escribir uno de sus mejores temas: In Your Eyes. Corte exquisito que incluyó en su disco So (Cuya versión en vivo del Secret World Tour es suprema).
Al final ellos también terminaros y Rosanna se volvió a casar con un magnate restaurantero, se volvió a divorciar y de nueva cuenta contrajo matrimonio con un ejecutivo del mundo del espectáculo.
Nunca sabré que tiene esa chica a la cual dos grandes músicos le regalaron - y los regalos quedarán para siempre- estas joyas de la música. Me atrevo a decir que lo que ellos vieron en Rosanna, es lo que yo veo todos los días cuando me despierto y miro a mi chica durmiendo a mi lado. No lo sé explicar y menos como ellos, pero sea lo que sea la magia y atracción que ejercen ustedes damitas con los de nuestra especie es algo de otro mundo.